Michael Vick fue declarado culpable de organizar peleas ilegales de perros y recibió una sentencia de 23 meses de cárcel. El jugador de los Falcons está recluido en la prisión de seguridad mínima de Leavenworth, Kansas desde el mes pasado.
La liga suspendió a Vick por tiempo indefinido y sin goce de sueldo. Sin embargo los Falcons, decidieron intentar recuperar algo del dinero pagado a Vick ya que, según la franquicia, Vick utilizó parte de ese dinero para fomentar las actividades que lo llevaron al mariscal de campo a prisión.
El dinero surgía de los bonos pagados por Atlanta en el período 2004-2007, pero el juez David Doty del distrito de Minneapolis dictaminó que los Falcons no podían recuperar la totalidad de los casi u$s 20 millones en disputa porque en ese caso se violaría el contrato colectivo de trabajo de la NFL. Por tanto, el jugador conservará u$s 16.25 millones y la franquicia recuperará tan solo u$s 3.75 millones.
“Él (Vick) está contento por algunas buenas noticias que le he podido dar en los últimos días, pero se da cuenta de que necesita seguir haciendo lo correcto para poder regresar a jugar fútbol americano”, dijo Lawrence Woodward Jr. abogado del jugador.
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