T.J. Houshmandzadeh y Chad Johnson llegaron desde la Universidad de Oregon en el año 2001, un par de receptores que desde un inicio prometieron cambiar el status de los Cincinnati Bengals y conseguir victorias para una de las franquicias olvidadas en la NFL. Han estado ocho años en la Liga, la mayor parte del tiempo lograron su objetivo, pero las últimas temporadas su desempeño ha decaído y los entrenadores ya comienzan a delimitar nuevas posibilidades en su roster.
Chad Johnson y T.J. Houshmandzadeh lograron llegar a los playoffs en tan sólo una ocasión, llegaron juntos al Pro Bowl y se convirtieron en el dúo más importante en la historia de los Bengals en la misma temporada. Sus días en la Liga ya están contados, al menos uno de los dos jugadores deberá abandonar el equipo en los próximos meses, teniendo así la oportunidad de buscar espacio en otra franquicia dentro de la Liga.
“No estoy seguro como va a terminar la temporada para nosotros” dijo Johnson. “Ha sido un largo camino el que hemos recorrido juntos. Esto se sentirá casi como un divorcio, él ha sido una gran ayuda para mí. Hemos estado juntos por casi nueve años, será verdaderamente extraño ver a alguien más en el lado opuesto a mi, estoy seguro que será lo mismo para él.”
La temporada tan débil, la producción inexistente y los contratos de cada jugador indican que uno de ellos partirá del equipo, y la balanza se inclina vertiginosamente hacia T.J. Houshmandzadeh. El receptor ha sido uno de los jugadores más importantes que haya tenido el equipo en años, sin embargo se convertirá en un agente libre al terminar la temporada, forzando a los Bengals a tomar una decisión sobre su estadía con el equipo. El jugador adelanta que no se ha discutido ningún avance sobre su contrato, tomándolo como preludio de su status con el equipo en el próximo año.
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